Chiaravalli Group, comprometido un año más con el Polti Kometa y el talento joven

El grupo Chiaravalli S.p.A., hoy actor principal en el sector de las transmisiones industriales, nació en los años 50 gracias a la capacidad técnica y empresarial de su fundador, Silvio Chiaravalli. La marca Chiaravalli pronto se convirtió en sinónimo de calidad e innovación tecnológica en el sector de la mecánica industrial. La conciencia de operar en un mercado en constante evolución ha llevado
al Grupo a caracterizarse por el diálogo constante con sus clientes, ofreciéndoles décadas de experiencia y pasión por la mecánica.

Como parte de esa conciencia de trabajar en un mercado constante, por tercer año consecutivo, el equipo Polti Kometa, nacido del compromiso de dos leyendas del deporte como Ivan Basso y Alberto Contador cuenta con el gran apoyo de Chiaravalli Group S.p.A. La labor realizada en la enseñanza a los jóvenes de los valores de sacrificio y dedicación, imprescindibles en el ciclismo, sirven para estrechar lazos con la histórica UC Bustese Olonia, formación italiana con la que la Fundación Contador colabora desde la temporada 2021 y que a partir de la temporada 2023 cuenta con el gran apoyo de Chiaravalli Group S.p.A, al igual que los equipos de la Fundación.

Sin ir más lejos y como parte de esta colaboración y ejercicio de apoyo mutuo entre estructuras, durante la pasada temporada, tanto Riccardo Archetti como Santiago Basso, ambos ciclistas de la Bustese Olonia, participaron en la concentración de mitad de temporada en Bormio junto al equipo profesional. Esta oportunidad que recibieron ambos ciclistas no es más que el reflejo del apoyo y ambiente de desarrollo en el que crecen como deportistas y como personas los corredores de la escuadra italiana.

La empresa lombarda, líder en la producción de componentes para la mecánica industrial, aumenta su presencia en el ciclismo, donde una temporada más será uno de los patrocinadores oficiales del equipo Polti-Kometa, con el apoyo también hacia la centenaria formación con sede en Varese. Una apuesta firme por la formación de jóvenes talentos en un deporte tan rico en valores como el espíritu de equipo, la capacidad de sacrificio, el respeto y la honestidad.

De la Bustese Olonia al equipo sub-23 ha dado esta temporada el paso Riccardo Archetti, que junto a Santiago Basso, aún ciclista junior de segundo año, estuvieron en la concentración del equipo antes del inicio de la temporada en Pinto. El paso dado ahora por Archetti, lo dieron primero los hermanos gemelos Tommaso y Gabriele Bessega.

«El año pasado fue mi último año en el equipo de la Bustese Olonia con el que corrí durante 6 temporadas. El cambio al Polti Kometa fue definitivamente un gran salto para mí», explica Riccardo Archetti, uno de los ciclistas que conoce bien esa colaboración entre la Bustese Olonia y la Fundación Contador de la que Chiaravalli forma parte activa. «Ya el año pasado tuve la oportunidad de participar en la concentración de Bormio con el equipo profesional. Allí encontré un hermoso ambiente compuesto por personas muy acogedoras y sobre todo preparadas, donde entendí que para mí era el mejor ambiente para mejorar y crecer como persona», añade. «Este año he hecho el salto al equipo sub-23 en el que me estoy encontrando muy bien tanto con el personal como con los compañeros de equipo. La forma de trabajar es diferente a la que estaba acostumbrado los años pasados porque no corremos todas las semanas, al estilo de los profesionales y eso nos deja mucho más tiempo para poder trabajar en nosotros mismos y mejorar gracias a los entrenamientos a medida», termina el joven italiano.

Además del caso de Archetti, Santiago Basso es otro de los ciclistas que ha podido disfrutar de las experiencias brindadas por la Bustese Olonia y la Fundación Alberto Contador. La última semana del mes de marzo participó junto al equipo junior en la Volta ao concelho de Loulé en Portugal. Más allá del resultado, pues una caída le hizo abandonar cuando era tercero en la clasificación general, pudo disfrutar de una «fantástica experiencia». Basso cuenta como fue dicho viaje con el equipo: «Me divertí mucho. Desde el principio se estableció un buen vínculo con mis compañeros y staff, lo que hizo que los días de carrera transcurrieran de la mejor manera posible. La organización fue perfecta. Me integré muy bien con mis compañeros desde la tarde que llegué al hotel y al final, sabiendo hablar bastante bien español, logré integrarme sin demasiados problemas». Cuenta también como de la misma manera disfrutó de las concentraciones en Bormio y Madrid: «En las concentraciones fue lo mismo, máxima organización e integración con los compañeros también. Todo perfecto».