Robinson Rincón Quijano

Procedente del Bicicletas Strongman, el corredor residente en Yopal Casanare (estado de Casanare), aunque nacido en el vecino Boyacá, es uno de los grandes talentos del ciclismo colombiano, con especiales aptitudes para la lucha contra el reloj. Rincón Quijano, que ya tuvo experiencia competitiva en Europa esta temporada tras su paso por el prestigioso Giro della Lunigiana con un combinado de su país, será el segundo corredor suramericano que forme parte de la plantilla de la estructura juvenil tras la experiencia con Samuel Flórez de 2023. Los cimientos ciclistas de Rincón Quijano están, como en tantos casos, en el entorno familiar. El padre que comienza a hacer bicicleta de montaña, encadena diversas rutas y recorridos y acaba siendo acompañado por otros miembros del hogar. “Participé de algunas de esas travesías y allí surgió el amor”, bromea. Poco a poco, acudiendo y participando a pequeñas competiciones de la zona, iban llegando logros. Pequeños pasos en carreras de festivales. “En ese proceso nos fuimos dando cuenta de que algo de potencial podíamos tener, especialmente ya desde cadete”, indica el corredor. Un momento en el que comenzaba a quedar a un lado su inclinación futbolística que inició con cinco años: hasta los doce o trece años jugaba al balompié y estuvo en la escuela del Atlético Nacional. Fuera de la bici, a Robinson le gusta mucho ayudar en todo lo posible en la finca familiar, ‘Morena Mía’ ya sea en cuestiones meramente agrícolas o en temas administrativos. “Disfruto mucho de los entrenamientos, es una de mis aficiones como puede ser ayudar en la finca o leer libros: vivimos en una zona quebrada, y en una hermosa ciudad, que se presta muy bien para la práctica de este deporte y para trabajar mi especialidad: la crono”.