Llega la Vuelta a la Ribera del Duero: a por una victoria inédita en una emergente carrera del calendario juvenil
Vuelta a la Ribera del Duero
Del 22 al 25 de agosto
Desde hace unos años el panorama competitivo ciclista de la provincia de Burgos está tejiendo un entramado de competiciones de gran peso dentro de sus respectivas categorías o incluso modalidades. La Vuelta a Burgos profesional es la más veterana, pero no falta su versión femenina (meses antes), de igual manera también se ha apostado por la bici de montaña y desde hace tres ediciones, en torno a la ribera del Duero con Aranda de Duero como centro neurálgico, el ciclismo juvenil cuenta con su particular gran cita estival.
La Vuelta a la Ribera del Duero es una carrera joven, y emergente, que de cara a su cuarta edición busca dar un nuevo paso a su consolidación como gran acontecimiento más allá de su comarca. La carrera burgalesa prosigue su expansión geográfica, incluyendo ahora suelo vallisoletano a una ruta que cuenta con escala en tierras sorianas y paso por territorio segoviano. El río Duero como hilo argumental. De cara a este 2019, la organización plantea un final en cuesta el primer día, junto a uno de los dos castillos (nota curiosa) de Curiel de Duero y propone una cronometrada individual para el tercer día que llegará a otro castillo, el de Peñaranda de Duero. Una prueba contrarreloj que promete ser decisiva. La última etapa no falla en su paso por el Alto de Valdevacas (1.109 m), una referencia para el cicloturismo de la zona con sus algo más de cuatro kilómetros y rampas máximas del 11%.
El Kometa Cycling Team acude con un equipo potente que mezcla corredores de primer y de segundo año. Carlos Rodríguez, Raúl García y Juan José Rosal encabezan un plantel que completan Francesc Bennassar, Pedro Beneit y David Quevedo. Las ambiciones son máximas para una carrera en la que la formación madrileña aún no ha logrado una victoria ni en su general final ni en ninguna de sus etapas.
“Si nos atenemos a los perfiles, va a ser una vuelta exigente. Vamos a tener un gran nivel de participación. Personalmente voy con muchas ganas de hacerlo bien y de encontrar sensaciones tras un parón por enfermedad. Y por supuesto de ayudar a mis compañeros en todo lo que sea posible para conseguir un buen resultado a nivel colectivo”, comenta el cántabro David Quevedo. El alicantino Pedro Beneit, por su parte, indica: “Me encuentro muy bien, he estado preparando los campeonatos de España y creo que llegaré en buena forma. Es una carrera rompepiernas, tengo curiosidad por ver si se adapta a mis cualidades. La crono quizá se me haga larga, sobre todo por los repechos y por la posibilidad de que pueda soplar algo de viento. Y sin duda, con el acumulado de los días anteriores, la última etapa va a ser muy dura”.
“Un equipo encabezado por Carlos, Raúl o Juanjo siempre es una garantía en tanto que son corredores que han demostrado una gran madurez y una gran capacidad para leer las carreras. La Vuelta a la Ribera del Duero es una carrera que está creciendo mucho y lo está haciendo muy bien. En el contexto de una temporada que será inolvidable, sería bonito lograr por fin incluirla en el palmarés del equipo juvenil de la Fundación Alberto Contador”, comenta Guillermo Gutiérrez, director del Kometa Cycling Team junior.
Las etapas.
22 de agosto: Pedrosa de Duero – Curiel de Duero (81, 9 km).
23 de agosto: Langa de Duero – San Esteban de Gormaz (96 km).
24 de agosto: Hontoria de Valdearados – Peñaranda de Duero (8,2 km CRI).
25 de agosto: Aranda de Duero – Aranda de Duero (118 km).