Fancellu y Grávalos se muestran en la ruta hacia Muskilda, donde sufre y resiste Martín
58ª Vuelta a Navarra
Etapa 4: Tafalla – Nuestra Señora de Muskilda / Ochagavia (150,6 km)
El detalle puede pasar desapercibido, pero explica muy bien lo que ha sido la actuación de la exigente jornada programa por la Vuelta a Navarra para este sábado más allá de resultados concretos: el Kometa Cycling Team fue el tercer mejor equipo del día en la etapa reina de la carrera, un periplo de gran exigencia por los Pirineos navarros en los que el calor fue otro de los protagonistas. La victoria parcial, en solitario, correspondió al británico Simon Carr (AVC-Aix-en-Provence), mientras que el catalán Gerard Armillas (Colpak), gran protagonista del día, ascendió al liderato provisional de una general en la que su paisano del Kometa Álex Martín es decimocuarto, a dos minutos clavados.
El desarrollo de la etapa reina de la Vuelta a Navarra vino a confirmar algo que ya se había esbozado en las dos primeras etapas: la fortaleza del italiano Alessandro Fancellu en esta carrera. El ciclista de Como, con sus opciones eliminadas por culpa de incidencias mecánicas un día antes, volvió a ser el mejor corredor del Kometa Cycling Team sub23 en la línea de meta. Fancellu acabó decimosexto, a poco más de tres minutos del ganador. Martín, que sufrió en la última subida en un nuevo gran día de aprendizaje para un recién llegado a la categoría, finalizó decimonoveno, a 3:34. “Hoy ha vuelto a ser nuestro mejor hombre, demostrando que era nuestro corredor más fuerte. Sin ese día malo de ayer, sin toda su mala fortuna, Fancellu hubiera estado entre los diez primeros, y en un buen puesto”, reflexiona el director Rafa Díaz Justo.
La cuarta etapa de la Vuelta a Navarra volvió a deparar multitud de ofensivas en sus primeros compases, movimientos en los que estuvo atento el italiano Alessio Acco para darle presencia al Kometa. De un grupo de diez ciclistas que llegó a rodar en cabeza de carrera con más de cinco minutos de margen, resultante de la fusión de una escapada de seis ciclistas y otros cuatro corredores que llegaron desde atrás en torno al kilómetro 52, acabaría saliendo Armillas. Atrás, no pocas alternativas en un pelotón donde ninguna estructura quería coger el peso de la caza. Muchos marcajes. Ni un gramo de fuerza gastado si otro puede sacar un rédito inmediato.
“La verdad es que el equipo ha estado muy bien durante todo el día. Es cierto que hemos sido un poco conservadores, pero pensando en el final tampoco podíamos hacer otro tipo de carrera. A unos cuarenta kilómetros de la meta se ha producido un corte muy interesante donde llevábamos a Fancellu y a Grávalos. La pena es que no terminó de funcionar, no hubo un entendimiento pleno. Al final acabaron siendo cogidos a veinte de meta, pero ya para entonces en el pelotón no veían que se les iba la etapa, que la carrera se les estaba haciendo por delante”, explica Día Justo.
De esa fuga saltaría Carr, a la postre ganador de la etapa. “Es una pena que en esa fuga al final no hubiera entendimiento. Carr, que se integró en ese movimiento que se había formado en el inicio del antepenúltimo puerto y concluyó después de su bajada, se marchó y acabó llevándose la etapa. Personalmente llevaba buenas piernas, pero ya hay que pensar en el mañana, donde vendrán más oportunidades”, explica el riojano Arturo Grávalos, a más con el paso de los días después unas primeras etapas con problemas de salud.
Una etapa de 100 kilómetros con inicio en Pamplona y final en Estella acogerá la quinta y última etapa de la ronda navarra. Una quinta fracción nada sencilla, con cuatro pasos de montaña puntuables y dos de ellos, Guirguillano y Lezaun, prácticamente encadenados. La cima de Lezaun se encuentra a menos de veinte kilómetros para el final, aunque en ese terreno los ciclistas tendrán que afrontar un par de repechos de entidad. El Puy será el último. “Estamos decimocuartos en la general. Es lo mismo hacer el decimoctavo que el octavo, ahora mismo. Con cabeza, vamos a jugar nuestras cartas. En esta última etapa va a hacer mucho zafarrancho, porque hay equipos que pueden ganar, es una etapa corta, exigente y hay que ver cómo recupera la gente”, concluye Díaz Justo.
