De la fortaleza colectiva de una formación con la moral alta en la decana de la Copa
87º Santikutz Klasika
Legazpi – Legazpi (145,8 km)
Presente en todas las ediciones de la Copa de España de la creación del certamen, en 1999, la Santikutz Klasika regresa a las carreteras después del forzoso aplazamiento de la pasada edición por culpa de la situación sanitaria generada por la pandemia del coronavirus. La prueba guipuzcoana propone un trazado diferente al de la edición de 2019. Aztiria, 5,7 km al 6,1%, será la última de las once ascensiones puntuables que propone la prueba para este año. Se coronará a menos de siete kilómetros para el final.
El equipo sub23 de la Fundación Contador viaja al País Vasco con un equipo formando por Vicente Hernaiz, Álvaro García, Arnau Gilabert, Álex Martín, David Martín, Fernando Tercero y el italiano Davide Piganzoli. El corredor lombardo debutará con sus nuevos colores en una prueba española y llega tras una destacada participación en el Giro di Romagna con una selección italiana en la que también estaban sus compañeros Alessio Acco y Andrea Montoli.
“El Giro di Romagna ha sido una gran experiencia, me he sentido muy bien desde el primer hasta el último día. El primer día pude atacar y rodar en la fuga, pero nos acabaron cogiendo en las cercanías de la meta. He trabajado mucho para mis compañeros, he aprendido mucho y estoy muy contento con mi rendimiento”, señala sobre su última prueba. Y con vistas a su estreno en las rutas del País Vasco aporta: “Estoy desando correr esta prueba. Para mí es todo un honor haber sido elegido. Es una carrera dura. A mí personalmente me gustan las pruebas así, con subidas duras, no tan largas, y en las que la disputa por la victoria pueda estar en un grupo reducido de unas veinte o treinta unidades. Vamos con muchas ganas a ayudar en todo lo posible al equipo”.
Otro ciclista que también debuta en Legazpi es Álex Martín: “No he corrido nunca en Legazpi. Es una carrera muy dura, sin ser para escaladores puros. Una carrera técnica y con subidas de mucha fuerza en la que ganaré un corredor listo que sepa gestionar muy bien la parte final. No es una carrear para escaladores puros, pero personalmente se me adapta bien: creo que me manejo bien en este tipo de subidas más cortas y explosivas. Vamos con la confianza de lo hecho en Valladolid, y además con un equipo muy fuerte. El perfil es muy bueno para Vicente, que está en una gran forma y sube mucho cuando está en forma”.
“La verdad es que acabamos muy contentos por cómo se dio el Memorial Ángel Lozano, porque esa victoria de David hizo justicia a como veníamos corriendo últimamente”, señala Martín al respecto del último fin de semana. “Todo el equipo estuvo donde tenía que estar para darle a David toda la tranquilidad necesaria para que se despreocupara y se pudiera centrar solo en afrontar la volata final. En la última parte de la carrera tratamos de estar mucho más activos aún con el objetivo de endurecer la carrera, ya que en sí no tenía una dureza excesiva y en el sprint podría entrar mucha gente que en otro contexto no estaría disputando. Podría darse un sprint más loco, en suma. David también se ha podido posicionar en la Copa y entra en la lucha por una general para la que aún queda mucho”.
“Me alegré mucho por David, es un chaval maravilloso, y por supuesto por el equipo. Compartimos unos días muy buenos hace unas semanas en el Trofeo Piva y el Giro del Belvedere. Es una gran recompensa al trabajo que está haciendo el equipo”, concluye Piganzoli.