David Domínguez: “Me encantaría poder competir en pruebas por etapas con jornadas variadas en cuanto a orografía”

La temporada 2022 trae consigo para la plantilla del EOLO-KOMETA Cycling Team sub23 varias altas catalanas y David Domínguez Vílchez (28 de julio de 2000) es otro de los exponentes del emergente momento dulce que se está viviendo en Catalunya con una importante generación de talentos y un calendario de nivel. El de Sabadell se presenta: “Soy un corredor completo. Siempre me definí como escalador, pero con los años me he dado cuenta que los puertos largos con pendiente importantes se me pueden acabar atragantando y que en grupos pequeños puedo estar en condiciones de poder disputar”.

Como en tantos otros casos, fue la bicicleta de montaña la primera actividad ciclista en la que este catalán de Sabadell dio sus primeras pedaladas. David empezó pronto a competir, prácticamente con los cinco años que tenía en sus primeras experiencias ciclistas. Y en el campo de las ruedas gordas se mantuvo hasta los once años de edad al mismo tiempo que compaginaba con otros deportes, como el fútbol, la natación o el atletismo… Aunque no el baloncesto, un deporte en el que su padre, Joaquín, compitió durante muchos años, sobre todo en el ámbito catalán. Su familia se ha apasionado con este deporte y acompañan a David a muchas pruebas. Lejos quedan las reticencias maternas de Lourdes, las fotos del pelotón amateur que toma su hermana Ana campaña tras campaña por toda la geografía ibérica son toda una institución y el padre, con pruebas cicloturistas como Terra de Remences o Quebrantahuesos en sus gemelos, también se ha sacado el curso de nivel III de director de ciclismo. Agnes, su novia, se ha sumado a la caravana de seguidores que le acompañan a muchas pruebas. Disfrutar del ciclismo en directo, a pie de cuneta, también es una pasión que no quiebra ni con los kilometrajes ni con la logística.

Domínguez, buen amigo del ciclista del EOLO-KOMETA Cycling Team Alejandro Ropero, comenzó a centrarse en el ciclismo en la categoría cadete, de la mano de la Penya Ciclista Nicky’s de Terrassa, una institución con una enorme tradición por la que han pasado, entre otros, Joaquín Purito Rodríguez o Airán Fernández. De cara a la categoría juvenil varias formaciones de Terrasa se unieron para competir bajo el mismo nombre. De este período, destaca David, le marcó mucho el Genésis Cycling Training Center de Juan José Méndez. “Me ayudaron muchísimo a progresar. Adrián Merino, mi entrenador aquellos años, fue muy importante. Y también Bernat Moreno, que era la persona que dirigía el proyecto: cambió mi forma de entrenarme y en definitiva de correr. Y como persona me hizo mejorar”, recuerda el nuevo corredor del equipo sub23 de la Fundación Alberto Contador.

Fruto de aquel trabajo el barcelonés cuajó una gran campaña en su segundo año en la categoría juvenil. “De cara al salto de categoría tenía apalabrado marcharme al Aldro cántabro, pero el proyecto acabó cerrando y prácticamente en noviembre me quedé sin equipo. Nos ayudaron mucho a poder encontrar un nuevo acomodo. Fue así como concreté el salto con el Rias Baixas y, tras un año con ellos, fiché por el Globalia de Salamanca. Con Iván Rodríguez de director he vivido grandes momentos, he aprendido mucho. Es un equipo pequeño, no tan gran grande como otros, pero también es una familia y el factor humano es maravilloso. Iván me ha enseñado todo sobre saber desenvolverme en las carreras. Yo igual iba más perdido y él me ha guiado y me ha hecho evolucionar”, señala. La pareja de su hermana, el corredor del Valverde Terra Fecundis Álex Ruiz, también ha sido un importe apoyo en este ciclo.

Su llegada al proyecto 2022 del EOLO-KOMETA Cycling Team sub23 se fraguó tras la pasada Vuelta a Madrid, cuando recibió una llamada de Rafa Díaz Justo. “Dos o tres semanas después tenía claro que era el momento. Alguna temporada anterior había mantenido algunas conversaciones más informales, pero en ese momento consideraba que era demasiado pronto y demasiado joven. Estas primeras concentraciones, tanto en Pinto como ahora en Oliva Nova, son muy productivas. Y vivimos cómo estamos dentro de un proyecto muy grande, muy profesionalizado a todos los niveles”.

Domínguez acabó el bachillerato, por la rama de ciencias, y compaginó sus estudios con algunos empleos. Después se centró en la competición. “He estado estas dos últimas campañas más enfocado al ciclismo para pelear por lograr el salto a profesionales. Me encantaría poder competir en pruebas por etapas con jornadas variadas en cuanto a orografía. Una Volta a Catalunya sería un sueño, también por correr en casa. En el campo amateur hay varias pruebas que me gustan mucho, pero quizás el Memorial Valenciaga por lo que supone sea la que más me atrae de todos”.