Alessandro Fancellu concluye sexto en Sangüesa y ya es quinto en la general de Navarra
58ª Vuelta a Navarra
Etapa 2: Pamplona – Sangüesa (132,5 km).
Diecisiete corredores se jugaron el triunfo en la meta de Sangüesa, donde el belga Maxim van Gils (Lotto-Soudal) se anotó el parcial y ascendió al liderato de la ronda navarra; un grupito en el que se encontraban Alessandro Fancellu y Álex Martín. Tanto el italiano como el catalán del Kometa Cycling Team mostraron muy buenas piernas en la subida definitiva al Monasterio de Leire, que resultó muy selectiva dada su cercanía, menos de una veintena de kilómetros, todos ellos favorables, a la línea de llegada en la calle Mayor. “La etapa ha sido durísima en lo climatológico, fue el primer día de calor, y por el recorrido, con seis puertos y uno de ellos de rampones”, sintetiza el director Rafa Díaz Justo.
Tras unos primeros compases de etapa muy intensos, con diversas tentativas de fuga y algunos momentos en los que el pelotón principal se fraccionó en varios grupos más pequeños, tres ciclistas acabaron destacándose en cabeza de carrera. Su fuga concluiría definitivamente antes del último ascenso a Leyre, tres kilómetros de gran exigencia en los que tanto Álex Martín como Alessandro Fancellu, de menos a más, acabaron consolidándose en la vanguardia de la carrera. De cara a meta, Lizarte y Lotto se emplearon a fondo para cazar al ‘caja’ Jefferson Cepeda, que rodaba en solitario y no daba síntomas de fatiga.
“El accidente del otro día se quedó solo en un susto, un gran susto eso sí, pero al final nada serio. Solo me dejó alguna pequeña molestia en las rodillas y en el cuello un par de días. Me encuentro bien y motivado”, aporta el bronce en los pasados Mundiales de Ciclismo de la categoría júnior, quinto en la general a seis segundos. Decimosexto concluyó en Sangüesa Álex Martín. “La subida era muy dura, sobre todo en su parte inicial. Y muy estrecha. Era fundamental entrar bien colocado. El inicio era muy violento”, explica el de Vilassar de Mar. La jornada no fue la mejor para el riojano Arturo Grávalos, enfermo. Joan Martí Bennassar y Alessio Acco se encargaron de rodar junto a él y apoyarle.
Este viernes la ronda navarra afronta una complicadísima jornada de media montaña entre Pamplona y Tafalla, sobre casi 140 kilómetros, con unos primeros cien de gran dificultad por el encadenado de las subidas a Etxauri (km 31,1), Guenbe (km 50), Goñi (km 59,8), Ulzurrun (km 77,3) y Guirguillano (km 103,3).