Fortunato, Piganzoli, Bais: un Giro di Lombardía para recordar
Al final quedan los abrazos, sinceros y verdaderos, que tienen el significado de decir adiós y gracias. Y quizás sea realmente justo empezar por aquí, por el final, para relatar este Giro de Lombardía. Los abrazos con los que Lorenzo Fortunato se despidió de todos tras haber honrado de la forma más hermosa la última carrera vistiendo el maillot del EOLO KOMETA, un 18º puesto junto a los más grandes. El año que viene Fortunato correrá en otro equipo, pero no se pueden ni se deben olvidar estos tres maravillosos años en los que hemos crecido juntos, empezando por el inolvidable día de la victoria en el Zoncolan. Cosas que quedan, y siempre quedarán.
En el Giro di Lombardía, Fortunato estuvo muy bien aguantando con el segundo grupo de perseguidores que intentaron hasta el final resistir la potencia arrolladora de un fenomenal Pogacar que pasó a conseguir una histórica tercera victoria consecutiva. Espléndido aguantando cuando la carrera explotó en la subida del Passo Ganda, muy bien pegado a un grupo de corredores fuertes «Lo deseaba profundamente», dijo Fortu al final, «y estoy contento porque quería dar las gracias a EOLO KOMETA por estos tres años maravillosos. Me han acogido como una familia y quiero dar las gracias a todos: Ivan, Alberto y Fran, a los patrocinadores Spada y Pedranzini, a todos mis compañeros de equipo y a todo el personal, desde los masajistas hasta los mecánicos. Gracias a todos, ha sido maravilloso».
Pero hoy no sólo Fortunato. Piganzoli ha seguido demostrando que cada día es más fuerte y maduro, y también ha sabido resistir muy bien el ritmo infernal de los últimos kilómetros para hacerse con el 28º puesto, un resultado maravilloso. «Creo», ha dicho Piga, «que este año ha sido muy importante para mí, estar delante en una carrera como la de hoy junto a estos corredores es precioso. Doy las gracias a este equipo que me está permitiendo vivir estas experiencias y crecer cada día». Y luego Mattia Bais, que una vez más no ha podido resistirse a su deseo de entrar en la escapada y ha logrado ser uno de los protagonistas del día: él y otros nueve corredores se han escapado con el banderazo de salida y han conseguido una ventaja de más de cuatro minutos. «Este era mi objetivo del día», declaró, «y estoy contento de haberlo conseguido. Me han cogido los más fuertes y he intentado aguantar todo lo que he podido para ayudar a Fortunato. Creo que podemos estar satisfechos con la carrera que hemos hecho hoy».