El debut de Diego Pablo Sevilla y el último Giro d’Italia de Francesco Gavazzi
El primer Giro d’Italia de su vida, un sueño hecho realidad, algo perseguido durante toda una vida y ahora por fin que se convierte en realidad. El último Giro d’Italia de su carrera, un capítulo que se cierra y una historia que termina para dar paso a algo diferente. Eso es lo que será este Giro para Diego Pablo Sevilla, que creció en la Fundación Contador y que ahora es profesional con el maillot del EOLO KOMETA; y para Francesco Gavazzi, que tras 18 años en las carreteras anunció su retirada al final de la temporada. Dos historias tan diferentes que convivirán, y que se entienden mejor juntas, unidas como lo están en la competición más importante para el equipo.
La primera vez de Diego
Diego Pablo Sevilla (San Martín de la Vega, 1996) ha recibido la confirmación del EOLO KOMETA de su debut en una Gran Vuelta esta temporada. En un Giro d’Italia que tanto significa para el equipo, y por supuesto para él. «Estoy muy emocionado y tengo muchas ganas, aunque ya llega un momento en el que también aparece ese sentimiento… no de preocupación pero sí pensando y tratando de prever lo que te vas a encontrar nuevo». Y es que aunque el temple y la calma que transmite la personalidad de Diego Pablo le permiten mantener su agradable sonrisa, hay también nervios.
«Tantos días de carrera, tres semanas… van a ser muchas cosas nuevas que hay que afrontar y hay que preparar al ser la primera vez en una Gran Vuelta», reconoce Sevilla. La lista de objetivos y los retos que el propio ciclista se marca son ambiciosos: «Por supuesto, quiero llegar al final de la carrera, a Roma, con la ilusión de aportar al equipo, de disfrutar de la carrera y siendo útil para lo que se quiera de mí». Al servicio de los líderes del EOLO KOMETA aunque también con la ambición de ser protagonista: «Quiero sentirme útil, coger una fuga, dejarme ver, dar visibilidad al equipo y sentir que no me queda grande la carrera, que puedo aportar».
No cabe duda lo especial que es participar en el Giro d’Italia. Pero lo es también para todo el proyecto de la Fundación Alberto Contador, que ha visto crecer al ciclista en su estructura. «He competido con este equipo desde categoría juvenil. En el mismo sitio donde has crecido y evolucionado, a la vez que lo ha hecho el equipo, llega la oportunidad de ser profesional y finalmente disputar una Gran Vuelta. ¿Qué más puedo pedir?».
Pero el proceso, todo el camino recorrido, tiene mucho de planificación y de hacer bien las cosas. Por eso, Diego Pablo Sevilla ha merecido la oportunidad y la ha trabajado con mucho tesón: «Me he preparado bien para el Giro. Después de San Remo, subí a concentrarme en altura en Sierra Nevada para estar bien en Sicilia. Quería ir al Giro d’Italia, merecer con mis actuaciones en la carretera esta plaza en la alineación. Después de esas competiciones en Italia, vi que tenía muchas posibilidades, que estaba trabajando en el buen camino. El trabajo se ha hecho bien, y ves que si no cometes errores y flaqueas al final llega la oportunidad».
Será la primera Gran Vuelta para Diego Pablo Sevilla y la última de Francesco Gavazzi.»Es un referente del que espero aprender», asegura el ciclista español. Y no le falta razón, ya que en su palmarés atesora más de 10 citas de tres semanas e incluso una victoria de etapa en La Vuelta: «Tiene mucha experiencia, seguro que va a aportarnos mucho a todos en carrera. Espero fijarme en los detalles, me apoyaré en él cuando tenga dudas y es un pilar fundamental para el EOLO KOMETA, más en este tipo de carreras». Son todo palabras positivas para un referente que afronta el final de su carrera deportiva: «Si es su última Gran Vuelta, quiero disfrutarla junto a él aunque cada uno de manera diferente», explica Diego Pablo.
Solo resta desear que todo salga bien. Que sea la primera de muchas para el corredor: «Quiero disfrutar el Giro d’Italia, es mi primera grande pero no quiero arrastrarme en los últimos días que serán muy duros, quiero acabar con buen sabor de boca e incluso estar en la pelea por disputar alguna etapa». Allí le veremos.
La última Gran Vuelta de Gavazzi
Una carrera profesional que cumple 18 años: muchas competiciones, y todas llenas de historias y recuerdos. Que llegará a su fin a finales de este año y dentro de unos días vivirá la belleza del Giro de Italia: el octavo, el último. Francesco Gavazzi es un hombre de pocas palabras, un personaje que refleja sus orígenes y una tierra como Valtellina: fuerte y áspera, sincera y fascinante. Carácter duro y callada generosidad, siempre al servicio de sus compañeros de equipo.
Se va al Giro, y así lo esperaba… «Sí, me esperaba la convocatoria para el Giro porque he estado trabajando bien desde principios de año y sobre todo he estado trabajando muy bien en las últimas semanas en la montaña. Subí al Teide específicamente para llegar a mayo a tope, así que sí: me lo esperaba. Y sí: me siento preparado». Un Giro en el que Gavazzi llevará los galones de capitán: «Mi papel será sin duda dirigir al equipo en el pelotón, aportar mi experiencia para apoyar a Albanese y Fortunato. Sin embargo, esto no significa que vaya al Giro para ser un simple extra: Estaré allí, y sin duda intentaré aprovechar los días de escapada».
Albanese y Fortunato: son las dos puntas de lanza del equipo, y son los que intentarán anotarse una victoria. ¿Es posible? «Tanto Alba como Fortu tienen piernas para ganar una etapa, y lo han demostrado en estas últimas carreras. Por supuesto, las piernas no son suficientes porque para ganar una etapa en el Giro y en el ciclismo también se necesita algo de suerte. No hace falta dar más consejos que éste: mantener la calma y pedalear con serenidad, pero arriesgar en los momentos adecuados».
Echemos un poco la vista atrás, al Giro d’Italia del pasado. ¿Cuál es el mejor recuerdo relacionado con esta carrera? «El recuerdo más bonito relacionado con el Giro fue la etapa en la que me quedé a las puertas hace dos años, la Foggia-Guardia Sanframondi, cuando acabé segundo… y fue una revancha personal. Sin embargo, el Giro de 2021 también está ligado al recuerdo más feo: en Perugia-Montalcino, la etapa de tierra, tenía muy buenas piernas y realmente sentía la victoria al alcance de la mano, pero desgraciadamente me caí por causas ajenas a mí a pocos kilómetros de la meta. Eso sí que es un gran pesar».
Hemos mirado atrás, intentemos mirar adelante: ¿qué espera Gavazzi de su último Giro de Italia? «Dos deseos. Quiero que el equipo gane una etapa. Y quiero intentar vivir yo mismo unos días estelares. Cerrar a lo grande una larga y bonita historia».
¿Y un consejo para Diego Sevilla, que está a punto de empezar el primer Giro de Italia de su vida? «Conozco a Diego y sé que es un gran profesional: sabe perfectamente lo que tiene que hacer y se merecía estar en esta salida. Sólo tengo un consejo para él: que lo disfrute todo. Porque la primera Gran Vuelta de tu carrera es algo especial, algo inolvidable, algo único».