Joan Martí Bennassar, campeón de España de Persecución Individual

Joan Martí Bennassar logró el pasado fin de semana proclamarse por segundo año consecutivo campeón de España de Persecución individual con un tiempo excelente, 3:28, tras haberlo sido también en su primer año junior y después de haber comenzado en la pista siendo campeón de España cadete por equipos. El mallorquín acreditó una vez más sus excelentes condiciones como rodador y contrarrelojista, y eso a pesar de no haber preparado especialmente la pista. “No había entrenado este campeonato, sólo adapté los dos últimos entrenamientos a la pista y nada más. El resto ha sido gracias al trabajo para la carretera y al buen estado de forma en el que estoy en estos momentos”, explica el corredor del Polartec. Su siguiente reto será el Trofeo Federación, que se corre el domingo en Gipuzkoa. “Estoy a tope de motivación par correrlo. Nos han dicho que el recorrido tiene un par de puertos de la Clásica Premundial y que será duro, pero me encuentro muy bien y muy fuerte”.

Bennassar comenzó como alevín en la Club Ciclista Inca, donde era director su padrino, y desde entonces ha seguido enganchado a su vocación. “Quise entrar en la Fundación Alberto Contador porque es uno de los mejores equipos de España y quería aprovechar las posibilidades que me ofrecían de pasar a Sub-23, porque aquí tiene más repercusión lo que haces y es un equipo de alto nivel, lo que significa que tienes más posibilidades de llegar a ser profesional, que mi objetivo”.

Su relación con la pista comienza gracias al Centro de Alto Rendimiento de Baleares y a las posibilidades que ofrece a sus corredores de entrenar en el Palma Arena, una de las mejores pistas de Europa. “En la pista llevo tres años y este es el tercer año que gano la persecución. En cadetes sólo corrí la cuarteta y fuimos oro, y estos dos últimos años he ganado la Persecución Individual”, cuenta Joan Martí, que se define, claro, como “un buen rodador al que le encanta la contra reloj, porque es una disciplina muy personal, donde dependes de tí mismo y en la que eres tú solo quien marca el tiempo”.

Pero al margen de este resultado, sus sueños siguen pasando por la carretera. “Soy un corredor que ruedo bien y paso la media montaña delante. Ahora lo que me gustaría es mejorar en ese terreno y conseguir estar delante también en los puertos largos, que por ahora me cuestan bastante más”. Todo ello para conseguir cumplir una buena temporada, la segunda y última como junior. “Este año me gustaría ganar alguna carrera, porque el año pasado no pudo ser. Este año lo daré todo por eso y por pasar a Sub-23, que es el siguiente paso de muchos de los que estamos en la Fundación Contador y soñamos con llegar a profesionales”.

Y si eso llega a suceder, Joan Martí Bennassar confiesa que todas las carreras “serán especiales para mí, pero llegar a correr clásicas como la París-Roubaix, Flandes, la Flecha o la Lieja será para mí una experiencia inolvidable en mi vida”.