Destacadísimo Diego Pablo Sevilla en el exigente camino ‘entroterra’ con destino a Palermo
Giro de Sicilia
Etapa 2: Capo d´Orlando-Palermo (236 km)
Aunque la evolución del deporte ciclista, y su expansión por el orbe y el calendario anual, ha introducido y reforzado apuestas nuevas en la confección de las etapas y los recorridos, en el ADN de la ruta siguen estando las distancias largas y la gestión derivada de los esfuerzos y la fatiga. El ciclismo es un deporte de fondo. La segunda etapa del renacido Giro de Sicilia trajo consigo este jueves una fracción de 236 kilómetros (más el recorrido de la neutralizada). A la postre, ha sido la jornada más larga en lo que va de temporada dentro del UCI EuropeTour, el circuito continental europeo. Y una de las más extensas de todo 2019, incluso contando pruebas WorldTour: solo la Milano-Sanremo (291 km) y el la Gante-Wevelgem (249,5 km) dentro de la élite de las élites ha presentado un recorrido de mayor longitud.
En el largo periplo hasta Palermo, largo, a ratos pasado por agua, de nuevo protagonismo para el Kometa Cycling Team. Su joven plantel, en muchos casos, no se había visto ante un recorrido de semejante longitud. “Va a ser mi primera vez”, sonreía en la previa el neoprofesional granadino José Antonio García. La etapa, con un ligero retraso sobre el peor horario previsto, marcada también por la neutralización de un pequeño tramo por cuestión de seguridad mediada la misma, acabaría resolviéndose al sprint, con victoria para Manuele Belletti (Androni), también ascenso al liderato para el velocista italiano. La formación continental de la Fundación Alberto Contador sería, sin embargo, una de las protagonistas de la mano de Diego Pablo Sevilla. El madrileño fue uno de los cinco escapados que rodaron en vanguardia durante buena parte de la jornada. En la volata volvió a involucrarse Antonio Puppio, aunque se vio cerrado por otros corredores: al final, vigésimo séptimo con el mismo tiempo que el ganador.
Con rentas máximas de cinco minutos Sevilla compartió trayecto con el danés Kron (Riwal), el lituano Luksevics (Amore e Vita) y los italianos Disante (Sangemini) y Toniatti (Colpack). Cuatro formaciones reincidentes tras apostar por la fuga también en la etapa inaugural: el Kometa Cycling Team era una de ellas. A siete kilómetros del final sería definitivamente neutralizada la escapada por un pelotón donde Delko, Bardiani, Androni y Gazprom habían venido trabajando con intensidad. A 3,5 kilómetros, sin embargo, tras una aceleración del ‘bardiani’ Tonelli, el italiano Stefano Oldani encabezaría la carrera en solitario. “En verdad no ha sido un ataque, estaba trabajando para Antonio, pero he acabado consolidando un pequeño hueco con el resto de los corredores. Después, de vuelta al pelotón, de nuevo me he puesto a ayudar a Puppio para que cogiera una buena posición”, explica el lombardo.
Sevilla logró coronar en primera posición del alto de montaña y de quien cruzara primero en la meta, si él o si compañero Cantón, dependería la identidad del portador de la ‘maglia pistaccio’ este viernes. El manchego finalmente retuvo el liderato provisional de esta general secundaria y este viernes emerge una jornada importante para poder consolidarlo, toda vez que en los 188 kilómetros entre Caltanissetta y Ragusa los corredores deberán afrontar la ascensión a Serra di Burgio. Además, la llegada al centro de Ragusa es en cuesta, un final que abre el abanico de aspirantes.
“Estoy reventado. La verdad es que no he tenido mis mejores piernas. Pero estos días hay que saber sufrir”, indica tras su grandísima actuación Diego Pablo Sevilla. Isaac Cantón, el líder de la montaña de la prueba italiana: “Estamos muy contentos. Ha sido un día muy loco, con aire, con lluvia, más de seis horas de bicicleta y con 3.000 metros de desnivel. Diego se ha podido filtrar en la fuga. Y yo, en lo personal, me encuentro muy recuperado de la caída de ayer y espero poder estar bien este viernes. Vamos a salir a por todas”.
