Anhelos de protagonismo en la ‘dekana’ Ordizia
95ª Prueba de Villafranca-Clásica de Ordizia
25 de julio: Ordizia-Ordizia (165,7 km)
Después de la brillante participación en el Giro de Aosta, donde el equipo ganó la siempre prestigiosa general por escuadras y el neerlandés Kevin Inkelaar acarició la victoria final en la general, el Polartec-Kometa regresa a la competición este miércoles en una prueba de gran poso histórico como la Clásica de Ordizia-Prueba de Villafranca. Un debut especialmente atractivo. La cita guipuzcoana es una de las carreras más antiguas del calendario español y camina con firmeza hacia el siglo de vida.
Miguel Ángel Ballesteros, Juan Camacho, Isaac Cantón, Awet Habtom, Kevin Inkelaar, Juan Pedro López y Diego Pablo Sevilla son los corredores seleccionados para competir en una Clásica de Ordizia que se disputa sobre 165,7 kilómetros en los que habrá que superar en cinco ocasiones el Alto de Abaltzisketa (3km al 7,8%), las dos últimas dentro de un circuito donde también hay que superar el Alto de Altzo (2,5 km al 6%).
Como en ediciones precedentes, los ‘worldtour’ Mitchelton-Scott y Movistar encabezan una nómina participativa en la que se encuentran varios equipos continentales profesionales como el Delko-Marsella, el Israel Cycling Team, el Burgos-BH, el Caja Rural-Seguros RG o el Euskadi-Murias. El australiano Simon Yates, ganador en 2016, parte como el principal favorito. “No la conozco en primera persona, pero por lo que me han contado y veo en el perfil será una carrera muy dura que se hará bastante exigente. Es una carrera donde los escaladores lo suelen hacer bien”, comenta Juan Camacho.
“Me encuentro bien, mejorando de Aosta. Acabé cansado y bastante disgustado. Ahora estoy muy feliz con los resultados y con todo lo que hicimos en el equipo. Estoy muy agradecido a los chicos, a todo el equipo. Lo dimos todo y enseñamos los dientes todos los días. También estoy realmente my agradecido a los técnico Andrea Morelli y Matteo Azzolini. Les debo mucho. Me han hecho creer y confiar más en mí mismo que muchas veces yo mismo”, dice Kevin Inkelaar.
La Ordiziako Klasika no es una carrera cualquiera. Creada en 1922, es la competición de un día decana del calendario español. Sólo los Campeonatos de España, que se remontan a los años finales del siglo XIX, y la Volta a Catalunya, organizada por primera vez en 1911, son aún más veteranos que una carrera, la vasca, que viene organizándose de manera ininterrumpida desde 1938. Aunque su recorrido se mantiene más o menos estable desde hace diez años, en torno a los 165 kilómetros, en décadas pasadas llegó a disputarse sobre 215 o incluso, como en 1963, 225 kilómetros.
Ricardo Montero, con cinco entorchados (1927, 1930, 1931, 1932, 1935) es el ciclista con más títulos de un palmarés donde le siguen, con cuatro, el australiano Neil Stephens (1991, 1993, 1994, 1995 ); y, con tres, Txomin Perurena (1971, 1972, 1976), Marino Lejarreta (1981, 1988, 1989), y Gorka Izagirre (2010, 2012, 2014).