Matteo Moschetti, cuarto en el sprint de Plougoumelen

Tour de Bretaña
Etapa 2: Louisfert-Plougoumelen (180 km)

Después de un primer día en el que no pudo involucrarse en la llegada masiva, el italiano Matteo Moschetti sacó a relucir su punta de velocidad en el desenlace de la segunda etapa del Tour de Bretaña. En una prueba con una interesante nómina de hombres rápidos, el transalpino del Polartec-Kometa firmó una destacada cuarta posición. Fue su compatriota Matteo Malucelli (Androni Sidermec) quien se impuso en Plougoumelen, batiendo al alemán Max Kanter (Team Sunweb) y al también italiano Jareb Mareczko (Wilier Triestina). Un triunfo que, tras su tercera plaza de la primera jornada, le catapulta al liderato provisional de una general donde Moschetti, decimoctavo, es el mejor clasificado de la escuadra madrileña.

La etapa, 180 kilómetros entre Louisfert y Plougoumelen, estuvo marcada por la apuesta ofensiva del francés Romain Bacon (Nogent Sur Oise) y el noruego Haakon Aalrust (Team Coopo Sykkel), una escapada consentida cuya diferencia administraría el pelotón en un juego que, a menos de 70 kilómetros para el final, deparó la formación de un cuarteto por la llegada desde atrás de los franceses Thevenot (Nogent Sur Oise) y Gouault (Roubaix LM). Con más de cuatro minutos de margen el cuarteto se plantaría en la primera de las vueltas al circuito final. Pero la diferencia bajaría con rapidez por el empeño de varios equipos con hombres rápidos.

Con poco más de medio minuto a falta de siete kilómetros para el final con respecto a un pelotón lanzadísimo, la fuga acabó siendo cazada a menos de tres. Los preparativos del sprint, la tensión de su inminencia, depararon una caída a falta de 500 metros que puedo salvar bien Moschetti y que no afectó a ninguno de los corredores del equipo. Previamente, a unos 20 kilómetros de la llegada, el austriaco Patrick Gamper y Juan Camacho se vieron involucrados en una caída de la que el peor parado, y por motivos mecánicos, pues afectó a su rueda trasera, fue el manchego. Ambos llegaron descolgados a más de nueve minutos.

Más allá de ese incidente, y en líneas generales, una jornada de positiva lectura para un Polartec-Kometa en el que también, tras un primer día algo dubitativo con problemas de estómago, mostró una mejoría el madrileño Diego Pablo Sevilla.

Este viernes, la etapa más larga del Tour de Bretaña: una tercera etapa que conecta Baden con Clohars Carnoët sobre 181,1 km.
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